El Gobierno se enfrenta a una nueva jornada de protesta prevista para este miércoles en las inmediaciones del Congreso, día en el cual los jubilados concentrarán en reclamo de una recomposición de haberes.
Luego del episodio de la semana pasada, en donde el operativo policial dejó más de un centenar de detenidos y una veintena de heridos, el oficialismo encara en la víspera de la movilización un plan para el despliegue de las fuerzas de seguridad, como también la estrategia en materia de comunicación.
A diferencia de la ocasión anterior, en esta oportunidad hay diferencias en cómo se abordará el accionar policial y en la convocatoria que se espera en Balcarce 50. Luego de que hinchadas de clubes de fútbol se dieran cita en el último encuentro, esta vez serán las universidades públicas las que darán el presente en apoyo a la medida. En el Gobierno estiman que a dicho actor social, que realizó una de las movilizaciones más numerosas contra la gestión de Javier Milei, se sumen organizaciones y partidos políticos.
Este martes se ultimaron los detalles para abordar el conflicto en una cumbre en Casa Rosada encabezada por el asesor presidencial Santiago Caputo, quien recibió en su despacho a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, el titular de la SIDE, Sergio Neiffert, y su segundo, Diego Kravetz. Participaron también el secretario de Transporte, Franco Mogetta, y el vicejefe de Justicia, Sebastián Amerio. El encuentro, que comenzó a las 11 y duró aproximadamente una hora y media, se realizó en las oficinas del Salón Martín Fierro, ubicadas en el primer piso.