Se trata de la bomba que impulsa agua cruda desde la Planta Potabilizadora Nº 3 a la Planta 2, la cual produce el 60% de agua potabilizada de Ushuaia.
La Dirección Provincial de Obras y Servicios Sanitarios (DPOSS) puso en funcionamiento -en la Planta Potabilizadora Nº 3- una nueva bomba de turbina vertical que impulsará agua cruda hacia la Planta Potabilizadora Nº 2.
Es la bomba de impulsión más importante del sistema de potabilización y distribución de agua en Ushuaia, de un total de 8 equipos que se encargan de la captación de agua cruda para el posterior proceso de potabilización.
La bomba tiene una potencia de 250 kilowatts, una capacidad de impulsar 780.000 litros de agua por hora y una mayor eficiencia energética, es decir, que realiza el mismo trabajo que la bomba anterior, consumiendo menos electricidad.
Su montaje y puesta en marcha demandó aproximadamente una semana, «lo que fue realizado con personal propio, con la supervisión de la empresa proveedora», explicó el presidente de la DPOSS, Cristian Pereyra.
Pereyra explicó que se trató de la parte final de la obra, que tuvo dos etapas anteriores: primero el relevamiento previo para el acondicionamiento de la bomba y la base de apoyo, y luego la demolición de la antigua base para la construcción de una nueva.
Por su parte, la ministra de Obras y Servicios Públicos, Gabriela Castillo, quien estuvo presente en la puesta en marcha del nuevo equipo, consideró que «es un momento importante porque se trata del recambio de una bomba estratégica para poder bombear desde el Arroyo Grande, el agua que no puede dar el Arroyo Buena Esperanza, de la que se abastece la Planta 2, la que aporta el mayor porcentaje de producción de Ushuaia».
«La bomba que ha sido reemplazada hacía 30 años que estaba cumpliendo su misión», agregó Castillo y consideró que «hoy comienza una nueva etapa».