Accidente costó la vida a dos trabajadores y dejó lesionados a otros dos. (La Prensa Austral)
La tragedia laboral que costó la vida de dos trabajadores y dejó a otros dos lesionados en la noche del sábado al interior de una planta de procesamiento de algas Magelan en la ciudad de Porvenir, capital de Tierra del Fuego, aún resuena con fuerza en la población fueguina.
Este martes en la mañana viajó a aquella ciudad la carroza fúnebre transportando el féretro de Adolfo Enrique Flores Sepúlveda (59), para su velatorio y exequias posteriores, mientras tanto uno de los operarios sobrevivientes, Boris Segura Salamanca, se mantiene con diagnóstico reservado, en la Uci del Hospital Clínico, en Punta Arenas. El otro funcionario, Alex Soto Sepúlveda, ha evolucionado satisfactoriamente. Por su parte, los restos de la ciudadana colombiana, Zulma Nayive Valencia (28), madre de 3 hijos, permanecen en el Servicio Médico Legal a la espera de su repatriación a su país. El certificado médico de defunción de Adolfo Flores estableció como causa inmediata de la muerte, una “intoxicación por ácido sulfhídrico”.
El orden de los sucesos que desencadenaron el fatal accidente, los relató Hans Caris Muñoz, supervisor de la empresa Magelan, con 34 años en la compañía y desde 2008 en Porvenir.
“Este trabajo lo hemos hecho desde siempre, sin ningún tipo de consecuencias para las personas”, comienza señalando, en una piscina abierta donde almacenan agua de mar para hacer la limpieza de las algas, para posteriormente avanzar al proceso de selección. En las restantes etapas sí se utilizan químicos. La zona de modificación química funciona en otro sector de la planta.
Reitera que en esta piscina sólo se almacena agua y conforme a la planificación, todos los fines de semana, finalizado cada turno, se procede a su limpieza. En esa función estaban los cuatro operarios en la noche del sábado 5 de abril. No suelen introducirse dentro de la piscina y sólo se limitan a abrir una válvula de despiche, cuya agua se evacúa a una canaleta, la que a su vez escurre hacia una piscina de decantación.
¿Qué pasó con la válvula?
Por alguna razón, sostiene Hans Caris, la válvula se estranguló o se obstruyó por la presencia de algún elemento extraño. “No sabemos qué pasó, porque en estos momentos la planta está cerrada. Esto implicará contratar a alguien especializado, provisto de un equipo de respiración autónoma, para meterse a la piscina, porque todavía hay presencia de ácido sulfhídrico”.
Plantea que “cuando se hace el trabajo de limpieza no existe ningún protocolo de medición de gases, siendo distinto cuando se opera en espacios confinados, cuando por ejemplo es menester limpiar un estanque cerrado, faena donde se exige a los operarios portar equipo de respiración, con careta facial completa y filtro de gases y vapores. En la mencionada área nunca se usó, porque no era necesario”.
Frente al estrangulamiento de la válvula de drenaje, Adolfo Flores, quien era líder de aquella zona, una de las personas fallecidas, se introdujo a la piscina y trató seguramente de liberar la válvula y se desvaneció a causa de la alta concentración de ácido sulfhídrico, el cual actúa inmediatamente, al ser un gas que se produce a través de la descomposición de elementos orgánicos.
“Yo tengo 34 años en la empresa y nunca había visto un alga en descomposición que generara ese tipo de ácido”, remarca el supervisor.
Zulma Valencia Angulo, asistente de Adolfo Flores, la joven colombiana fallecida, se imaginó que a su compañero de faenas le había sobrevenido un ataque cardiaco y bajó a auxiliarlo. Pero, igualmente, de forma instantánea, se desplomó.
Un tercer trabajador, Alex Soto Sepúlveda, actuó por instinto, acudiendo en rescate de ambos, pero igual sucumbió. Y el jefe de turno, Boris Segura, al percatarse que sus tres compañeros se habían desvanecidos, descendió también a la piscina. En medio de un ambiente tóxico y al advertir que estas personas convulsionaban, trató de escapar hacia el fondo de la piscina, pero cayó a mitad de camino.
Esta secuencia de los hechos corresponde a lo captado por la cámara de seguridad del recinto, cuya grabación fue puesta a disposición de la Fiscalía y de la Brigada de Homicidios de la PDI que lleva adelante las diligencias investigativas.
Además de la PDI, este domingo también se constituyeron en el lugar personal de la seremi de Salud y de Dirección del Trabajo, poniendo en marcha de este modo a su investigación administrativa.
“Como empresa queremos llegar a la causa basal, cómo se generó este accidente”, enfatizó Hans Caris.
Profundidad
La piscina, con agua al tope, tiene una profundidad máxima de alrededor de 1,70 metros. “Cuando los operarios estaban en plena faena de limpieza, no tenía agua, estaba el puro concho. De acuerdo a lo que se logra apreciar a través del video, ellos estaban operando una manguera de 4 pulgadas, haciendo la limpieza desde arriba. Pero por algún motivo no salió el agua, no evacuó. Al ser una válvula de mariposa, este mecanismo se obstruyó con algún elemento, no descartándose, incluso, el ingreso de algún animal pequeño, lo que ha ocurrido, o algún molusco que haya traído un alga. En todo caso, es sólo una especulación”, subraya el supervisor.
En Porvenir la empresa tiene 15 años de presencia y si bien había enfrentado accidentes menores, pero nunca de esta magnitud.
En la planta funcionan tres turnos de 12 personas, más 15 administrativos.
Todo el año trabajan con algas. En temporada larga se trabaja con luga roja (nombre científico Gigartina Skottsbergii), de la cual se extrae la carragenina, un aditivo para uso alimentario, cosmético y cuidado personal.
Los sobrevivientes
El jefe del turno, Boris Segura, quien presenta la condición médica más delicada, lleva 27 años en la compañía. “Llegamos desde la planta de Puerto Montt en 2008. Nos trasladaron para poner en servicio la planta y adiestrar la gente para enrolarla a los turnos. Nos gustó la zona y nos quedamos acá”, apunta Caris Muñoz.
Sobre el estado de salud de su amigo, confiesa que “Boris ingresó muy complicado, pero confiamos en Dios que saldrá adelante”.
Acerca del segundo lesionado, Alex Soto, puntualiza que felizmente su recuperación está avanzando. Este es trabajador de una empresa contratista.
Magelan está corriendo con todos los gastos funerarios y médicos de las víctimas. “Se me pidió que transmitiera a los familiares la tranquilidad que la empresa se hará cargo de todo”.
Desde Santiago viajó a Magallanes el gerente general de la compañía, quien junto al representante legal de la empresa en Porvenir, hacen los trámites para la pronta repatriación de los restos de Zulma Valencia, a su país natal.
¡Buena noticia!el jefe de turnoBoris Segura salió de riesgo vital
En medio de la terrible tragedia que azota a la compañía, el supervisor Hans Caris regresó anoche a las 20 horas a Porvenir para acompañar los restos de Adolfo Flores, llevando buenas noticias. Boris Segura, jefe del turno de esa noche que fue rescatado en riesgo vital, salió de su condición crítica y le comienzan a bajar gradualmente la dosis de sedantes, evolucionando satisfactoriamente.
En tanto, el segundo trabajador sobreviviente, Alex Soto, fue trasladado este martes por la mutual hasta la Clínica RedSalud Magallanes, encontrándose en plena recuperación.